Roncesvalles-Irati



Esta es la ocasión de recorrer una parte del Camino de Santiago, pero al revés. Y es que, desde el fascinante conjunto monumental de Roncesvalles, surge la ruta jacobea en España. Un camino inmerso en la hermosura de los verdes paisajes forales y la hospitalidad de sus bonitos pueblos.
 
Dejamos Pamplona por Burlada y en el cruce de Villava (localidad de origen del campeón de ciclismo Miguel Induráin), tomamos la N135 dirección a Francia. Pasamos Huarte y seguimos hacia Francia y Zubiri, acogedora localidad con un puente gótico medieval del que se dice que puede cuidar la rabia. Nos espera un paisaje precioso.
 
Cogemos la vía N138 que en 7 kilómetros nos conducirá hasta Eugui. Es una muy pequeña villa compuesta por escasas, pero grandes casonas norteñas ubicadas junto al pantano de Eugui, donde embalsan el agua para la comarca de Pamplona desde 1971. Al ser para consumo humano, el baño no está permitido. Este lago artificial asiduamente nos regala el reflejo de Eugui y el monte Quinto Real, 5,900 increíbles hectáreas habitadas por hayas, arces, acebo, boj, jabalíes, zorros, ciervos,... En el inicio del otoño, se puede escuchar la berrea de los ciervos machos.
 
Volvemos a la N135 para pasar los puertos sencillos de Erro (801 m.) y Mezquíriz (922 m.). Atravesaremos Burguete, pueblo jacobeo que mantiene una calle-calzada peregrina e imponentes casonas blasonadas. Llegamos a Orreaga-Roncesvalles, enclave vital en Europa durante varios siglos y un lugar increíble con un inmenso significado histórico para Navarra.
 
De nuevo, retrocedemos, y tomamos la carretera autonómica NA140. Abandonamos Garralda, llegamos a Aribe y, en este punto, tomamos el desvío hacia Orbaiceta, hasta llegar a su bella Fábrica de Armas, acompañados por la impresionante imagen de la Selva de Irati. Sorprende aquello de visitar una fábrica de armas. Al verla, comprendemos por qué es un lugar mágico.
 
De vuelta en Aribe, cogeremos el desvío hacia Villanueva de Aézkoa, en un valle de 925 metros de altitud donde hallaremos sus fámosos hórreos, y la iglesia de San Salvador.
 
Por último, cuidado con las carreteras en invierno: la nieve y el hielo son habituales.